Detecta inflamación o infecciones midiendo la velocidad de sedimentación de eritrocitos
La velocidad de sedimentación globular (VSG) es un examen de sangre que mide qué tan rápido se acomodan los glóbulos rojos en el fondo de un tubo. Si se sedimentan más rápido de lo normal, puede ser señal de inflamación en el cuerpo. Este estudio no dice exactamente qué enfermedad tienes, pero ayuda a detectar infecciones, enfermedades autoinmunes o problemas crónicos como la artritis o el lupus.
Ayuno de 8 a 12 horas.
La VSG es una prueba de sangre que mide la rapidez con la que los glóbulos rojos se depositan en el fondo de un tubo de ensayo durante una hora. Una sedimentación más rápida puede indicar la presencia de inflamación en el cuerpo.
Los resultados se expresan en milímetros por hora (mm/h). Valores elevados pueden indicar inflamación, infecciones, enfermedades autoinmunes o ciertos tipos de cáncer. Sin embargo, la VSG por sí sola no diagnostica ninguna enfermedad específica.
Generalmente, la VSG se realiza cuando hay síntomas de inflamación inexplicables, como fiebre, dolor articular o fatiga persistente. También se puede solicitar para monitorear enfermedades crónicas o el progreso del tratamiento. No es una prueba de rutina en personas sin síntomas.
Se extrae una muestra de sangre de una vena del brazo. No se requiere ayuno ni preparación especial. El procedimiento es rápido y generalmente no causa molestias significativas.
Factores como la edad, el sexo, el embarazo, la anemia y el uso de ciertos medicamentos pueden influir en los resultados. Por ejemplo, los anticonceptivos orales y la cortisona pueden aumentar la VSG, mientras que la policitemia y la leucocitosis pueden disminuirla.
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